La ropa puede proteger nuestra piel de los rayos solares: bloqueando, absorbiendo o reflejando la radiación.
Se trata del único “método” que permite protegerse del sol empleando estos tres modos a la vez. La tela bloquea los rayos, el color de la prenda los absorbe o refleja y los tratamientos químicos especiales actúan absorbiendo la radiación. Algunas telas incluso convierten la radiación en luz visible inofensiva.
Clasificación del grado de protección: Factor de protección ultravioleta (FPU)
Al igual que las cremas protectoras, la ropa también tiene su propio sistema de clasificación según grados de protección, el factor de protección ultravioleta (FPU) que indica la cantidad de radiación ultravioleta solar que es capaz de absorber una prenda. (Ejemplo: una protección 50 significa que sólo uno de cada cincuenta rayos de sol puede atravesar el tejido, lo cual reduce la exposición de la piel a la radiación de forma muy considerable)
¿Cómo elegir la ropa adecuada que me proteja de los rayos solares?
La protección a los rayos ultravioletas que nos ofrece la ropa depende de cuatro factores: el color, el tipo de material, la densidad de las fibras y el grosor.
- El color: influye mucho en la protección. A colores más claros, menor protección solar y viceversa. Cuanto más oscura es la prenda, mejor absorbe los rayos del sol y proporciona mayor protección. Lo cual provoca aumento de temperatura pasar algo de calor en épocas estivales.
- El material: el poliéster o la lana son los materiales que mejor protección ofrecen frente a la radiación. El algodón, la seda natural, las prendas acrílicas y de poliamidas sin embargo ofrecen una protección más baja.
- La densidad de las fibras y el grosor de la ropa: son dos factores importantísimos también. Cuanto mayor sea la densidad y el grosor, menor capacidad tendrán los rayos de sol de atravesar la ropa.
Consejos básicos a la hora de elegir ropa que nos proteja frente al sol
- Utiliza tejidos ajustados, pues no dejan que se cuelen los rayos.
- Elije prendas que cubran la totalidad de la piel expuesta: mangas larga, pernera larga y cuellos cerrados. Así se obtiene la mayor protección posible en zonas expuestas.
- En verano, dado que la ropa que suele usarse es de algodón, más clara y más fina, es necesario que se utilice crema de protección solar bajo la ropa. También se puede utilizar determinados detergentes especiales que aportan factor de protección solar a los tejidos.
- Utiliza gorro o sombrero: La cara y la cabeza reciben una gran cantidad de rayos ultravioleta. Elige sombreros de color claro en el exterior para reflejar la radiación y mantener la cabeza fresca. Eso sí, el forro que sea oscuro en el ala para evitar que la radiación se refleje en el rostro.
A tener en cuenta
Existen algunas situaciones en las que la ropa no es suficiente y en las que debes tener especial precaución:
- Pasear al lado del agua o por la arena. El agua refleja e incrementa la potencia de los rayos solares que inciden directamente sobre tu piel. La arena también refleja un 30% las radiaciones que inciden sobre ella. Es importante utilizar crema protectora en estas circunstancias.
- Cristales del coche. Apenas tienen función protectora (por un cristal convencional pasan alrededor del 60% de las radiaciones solares. Los cristales tintados sí que actúan como un factor protector de hasta un 80.
- El césped, y más si está húmedo, refleja el 20% de las radiaciones que recibe. Atención con tumbarse en la hierba sin usar protección solar.
¡Muy buen post!
ResponderEliminarLo cierto es que a veces los rayos solares pueden ser realmente peligrosos.
Demasiado a menudo solamente tenemos en cuenta la protección solar en las partes descubiertas de nuestra piel sin caer que una mala decisión en la vestimenta puede significar daños en las partes del cuerpo teóricamente protegidas.
A pesar de eso y al ritmo que va el calentamiento global, pronto va a ser necesaria ropa ignífuga para pasear por la playa. :) :)